PARADIGMA POSITIVISTA O NATURALISTA
Emile Durkheim
(Francia, 1858-1917) es el representante del Paradigma Positivista.
Gran parte de su obra está dedicada a
fundamentar el carácter científico de la sociología. En "Las reglas del
método sociológico" de 1895, plantea la necesidad de abordar ciertas conductas,
de una forma distinta a como lo hace la psicología o la biología, les denomina hechos
sociales. Siguiendo los criterios de las ciencias naturales, especialmente de
la física, los hechos sociales deben ser el objeto de estudio de la sociología, abordados objetivamente
por medio de reglas metodológicas (método científico), que el científico social debe aplicar para
descubrir las sus causas sociales de tales conductas, y las leyes del comportamiento social.
Durkheim reconoció que
la sociedad existe más allá que los individuos que la componen; la sociedad
tiene una vida propia que se extiende más allá de nuestras experiencias
personales. Estaba aquí antes de que hubiéramos nacido, nos reclama mientras
estamos vivos, y permanecerá mucho después de que nos hayamos ido. Explicaba
que las pautas de la conducta humana forman estructuras establecidas; son
hechos sociales que tienen una realidad objetiva mas allá de las vidas y las
percepciones de los individuos concretos. Las normas culturales, los valores,
las creencias religiosas permanecen como hechos sociales. Experimentamos la
influencia de la sociedad cuando vemos el orden que existe en nuestras vidas o
cuando nos enfrentamos a la tentación de romper normas y sentimos que las
reglas morales nos detienen. Su opinión era que los desordenes podían
solucionarse mediante reformas sociales. Algunos de los conceptos fundamentales
en la obra de Durkheim son: Hecho social, Coerción, Cohesión.
LOS HECHOS SOCIALES
Emilio Durkheim define Hecho Social como: las maneras de hacer, pensar y sentir exteriores al individuo, que ejercen un poder coercitivo sobre su conducta orientándola en todo su desarrollo. Ademas son colectivos.
Durkheim manifiesta en su concepto de hecho social cómo los caracteres culturales moldean a los sujetos y les predisponen a comportarse y pensar de una determinada manera, en concreto en función de los elementos culturales que el sujeto haya ido interiorizando a lo largo de su proceso de socialización, un proceso que durara toda su vida biológica y social. Se obtiene de esta clara relación el significado del hecho social por su claro condicionamiento de rasgos y actitudes culturales que influyen en el individuo tanto de forma consciente como de forma inconscientes y que le predisponen a actuar y pensar de una determinada manera.
Durkheim manifiesta en su concepto de hecho social cómo los caracteres culturales moldean a los sujetos y les predisponen a comportarse y pensar de una determinada manera, en concreto en función de los elementos culturales que el sujeto haya ido interiorizando a lo largo de su proceso de socialización, un proceso que durara toda su vida biológica y social. Se obtiene de esta clara relación el significado del hecho social por su claro condicionamiento de rasgos y actitudes culturales que influyen en el individuo tanto de forma consciente como de forma inconscientes y que le predisponen a actuar y pensar de una determinada manera.
Revisemos los características básicos
de los hechos sociales.
Exteriores: El hecho social, viene desde afuera del individuo. Actúa por tradición, repetición, costumbre. se da en sociedad o en grupo, no individual.
Exteriores: El hecho social, viene desde afuera del individuo. Actúa por tradición, repetición, costumbre. se da en sociedad o en grupo, no individual.
Coercitivos: El hecho social es impuesto desde afuera.
Colectivos: El hecho social es parte de la cultura de la sociedad. Se diferencia de toda forma individual.
Durkheim y la modernidad
Según Durkheim, para llegar a ser científica, la sociología debía estudiar Hechos Sociales, es decir, aspectos de la vida social -como el estado de la economía o la influencia de la religión- que configuran nuestras acciones individuales. Creía que debíamos estudiar la vida social con la misma objetividad con que los científicos se ocupan de la naturaleza.
El primer principio de la sociología para Durkheim era el famoso "¡Estudia los hechos sociales como si fueran cosas!". Con ello lo que quería decir era que la vida social puede ser analizada con el mismo rigor que los objetos o acontecimientos de la naturaleza.
A Durkheim le preocupaban los cambios que en su época estaban transformando la sociedad y creía que lo que la mantiene unida son los valores y costumbres compartidos.
Su análisis del cambio social se basaba en el desarrollo de la división del trabajo (el aumento de las diferencias complejas entre las distintas ocupaciones). Para Durkheim este proceso estaba desplazando cada vez más a la religión como principal núcleo de cohesión social. A medida que se expande la división del trabajo, las personas se van haciendo más dependientes de los demás, porque cada una de ellas necesita bienes y servicios que le proporcionan los que realizan otras ocupaciones.
Según Durkheim, los procesos de cambio en el mundo moderno son tan rápidos e intensos que crean grandes trastornos sociales, que él vinculaba con la anomia, una sensación de falta de objetivos y de desesperación producida por la moderna vida social. Los controles y normas morales tradicionales que solía proporcionar la religión han sido prácticamente destruidos por el desarrollo social moderno y ello deja a muchos individuos de las sociedades modernas con el sentimiento de que su vida cotidiana carece de sentido.
Según Durkheim, para llegar a ser científica, la sociología debía estudiar Hechos Sociales, es decir, aspectos de la vida social -como el estado de la economía o la influencia de la religión- que configuran nuestras acciones individuales. Creía que debíamos estudiar la vida social con la misma objetividad con que los científicos se ocupan de la naturaleza.
El primer principio de la sociología para Durkheim era el famoso "¡Estudia los hechos sociales como si fueran cosas!". Con ello lo que quería decir era que la vida social puede ser analizada con el mismo rigor que los objetos o acontecimientos de la naturaleza.
A Durkheim le preocupaban los cambios que en su época estaban transformando la sociedad y creía que lo que la mantiene unida son los valores y costumbres compartidos.
Su análisis del cambio social se basaba en el desarrollo de la división del trabajo (el aumento de las diferencias complejas entre las distintas ocupaciones). Para Durkheim este proceso estaba desplazando cada vez más a la religión como principal núcleo de cohesión social. A medida que se expande la división del trabajo, las personas se van haciendo más dependientes de los demás, porque cada una de ellas necesita bienes y servicios que le proporcionan los que realizan otras ocupaciones.
Según Durkheim, los procesos de cambio en el mundo moderno son tan rápidos e intensos que crean grandes trastornos sociales, que él vinculaba con la anomia, una sensación de falta de objetivos y de desesperación producida por la moderna vida social. Los controles y normas morales tradicionales que solía proporcionar la religión han sido prácticamente destruidos por el desarrollo social moderno y ello deja a muchos individuos de las sociedades modernas con el sentimiento de que su vida cotidiana carece de sentido.
Paradigma
Comprensivista o Interpretativo
Max Weber (Alemania,
1864-1920) representa al paradigma
Comprensivista o Interpretativo. El punto de partida de Weber es el estudio de
los comportamientos a partir de las intenciones de los sujetos al relacionarse.
Sostiene que al investigar sobre personas no se pueden obtener conclusiones del
tipo causa-efecto como si sucede en las ciencias naturales. La unidad de
análisis fundamental es la acción social.
La acción es todo conducta intencional, es decir que se realiza por un motivo; es social porque está orientada hacia otros sujetos.
Tipos de acción social:
Weber consideraba que el capitalismo industrial era en esencia de motivación racional, dado que los capitalistas persiguen beneficios de una manera sumamente racional.
Weber llegó a la conclusión de que los ciudadanos de las sociedades pre-industriales se aferran a la tradición, mientras que los ciudadanos de las sociedades industriales-capitalistas respaldan la racionalidad. Las personas en las sociedades modernas aceptan y persiguen la racionalidad: un deliberado y cálculo de de los medios más eficientes para lograr un objetivo determinado. Consideraba tanto la Rev. Industrial y el capitalismo, como evidencias de una oleada histórica de racionalidad. Utilizo la expresión racionalización de la sociedad para indicar el cambio histórico desde la tradición hasta la racionalidad como el modo dominante del pensamiento humano, definiendo el carácter de la sociedad moderna. Llegó a la conclusión de que el mundo y la sociedad moderna de ha desencantado, esto es, que los lazos sentimentales con el pasado se han sustituido por el pensamiento científico y la tecnología. La labor del sociólogo se centra en comprender las acciones de los sujetos en sociedad, para ello elabora instrumentos sociológicos para llevar adelante esa tarea. Algunos de esos instrumentos son los que denomina tipos ideales de acción social, que son de ayuda para comprender el sentido subjetivo de las acciones. Estos tipos ideales son: el tradicional, el afectivo, el racional orientado por valores, y el racional orientado por fines.
La acción es todo conducta intencional, es decir que se realiza por un motivo; es social porque está orientada hacia otros sujetos.
Tipos de acción social:
- Tradicional (costumbre); Son acciones conducidas por principios, normas, etc. en las cuales el componente racional es prácticamente insignificante. La rutina colectiva es el punto de partida originario en que puede surgir la acción social como tal, en cuanto acción tradicional; aquí la racionalidad subjetiva parece disuelta en el automatismo mecánico de la costumbre popular.
- Afectiva (emocional); De carácter principalmente irracional guiada por emociones como el amor, odio, etc. La acción afectiva constituye un momento posterior en el proceso de racionalización, y su contenido es la pasión individual. En su propia descarga afectiva, la conciencia subjetiva rompe con la rutina tradicional y, afirmándose como subjetividad, se pone en camino de la auto conciencia racional.
- Racional con arreglo a valores; Es decir además de perseguir un fin racional están guiadas por principios o normas morales. La racionalidad con arreglo a valores sigue implicando el momento de la colectividad y se corresponde con formaciones intelectuales tales como la religión, la ideología o la ética (determinada por la creencia en el valor religioso, ético o de cualquier otro y determinada conducta, sin relación alguna con el resultado).
- Racional con arreglo a fines: Cuando la razón subjetiva es auto consciente de sus fines individuales, la racionalidad deviene instrumental; es el momento de la acción racional con arreglo a fines, en la que su forma teórica es la ciencia, susceptible de aplicación tecnológica. Utilizadas como medios destinados a alcanzar un fin racional.
Weber consideraba que el capitalismo industrial era en esencia de motivación racional, dado que los capitalistas persiguen beneficios de una manera sumamente racional.
Weber llegó a la conclusión de que los ciudadanos de las sociedades pre-industriales se aferran a la tradición, mientras que los ciudadanos de las sociedades industriales-capitalistas respaldan la racionalidad. Las personas en las sociedades modernas aceptan y persiguen la racionalidad: un deliberado y cálculo de de los medios más eficientes para lograr un objetivo determinado. Consideraba tanto la Rev. Industrial y el capitalismo, como evidencias de una oleada histórica de racionalidad. Utilizo la expresión racionalización de la sociedad para indicar el cambio histórico desde la tradición hasta la racionalidad como el modo dominante del pensamiento humano, definiendo el carácter de la sociedad moderna. Llegó a la conclusión de que el mundo y la sociedad moderna de ha desencantado, esto es, que los lazos sentimentales con el pasado se han sustituido por el pensamiento científico y la tecnología. La labor del sociólogo se centra en comprender las acciones de los sujetos en sociedad, para ello elabora instrumentos sociológicos para llevar adelante esa tarea. Algunos de esos instrumentos son los que denomina tipos ideales de acción social, que son de ayuda para comprender el sentido subjetivo de las acciones. Estos tipos ideales son: el tradicional, el afectivo, el racional orientado por valores, y el racional orientado por fines.